En una situación de incendio, la propagación del fuego puede ser muy perjudicial para las instalaciones físicas. Pero el humo, que contiene gases tóxicos, es la mayor causa de daños (o muerte) a las personas. Las estadísticas del Departamento de Bomberos muestran que la mayoría de las muertes en incendios son el resultado de la gran cantidad de humo negro y denso, lo que dificulta la visibilidad y, en consecuencia, el escape y rescate de personas, y de la intoxicación por gases tóxicos contenidos en el humo.
Por lo tanto, la seguridad de los cables internos utilizados en edificios y lugares con gran circulación de personas se vuelve cada vez más importante, y la atención de los fabricantes, instaladores y de los propios usuarios. La preocupación por la seguridad de las personas, así como la protección de las inversiones en equipamiento y construcción, ha sido un punto clave para la elección de productos para nuevos edificios, la actualización tecnológica de proyectos, salas de telecomunicaciones e instalaciones eléctricas en general.
Definir el tipo de cable utilizado en un proyecto es fundamental para la protección de la infraestructura. Para ello, es importante comprender las características de inflamabilidad, densidad y toxicidad del humo, bajo las diversas aplicaciones de cables en una infraestructura de red.
En general, los cables para instalaciones internas se clasifican en cinco tipos, según su comportamiento frente a la llama (inflamabilidad), de acuerdo con la norma ABNT NBR 14705 [1]:
Plenario – Cable Óptico/Metálico Plenario (COP/CMP) – o Clasificación OFNP u OFCP (para cables importados de los EE.UU.)
Adecuado para aplicaciones dentro de conductos de aire acondicionado, aplicación horizontal, en lugares confinados, con o sin flujo de aire forzado, o lugares con condiciones de propagación del fuego similares a estas.
Riser – Cable Óptico/Metálico Riser (COR/CMR) – o Clasificación OFNR u OFCR (para cables importados de los EE. UU.)
Indicado para uso en plomadas “shaft”, canal empotrado en vigas, columnas o losas, para el paso de cableado y/o tuberías, aplicación vertical en la que el paso de cables exceda más de un piso, lugares sin flujo de aire forzado, tuberías con poca ocupación o lugares con condiciones similares de propagación de incendios.
Uso general – Cable Óptico/Metálico (COG/CM) – o Clasificación OFN u OFC (para cables importados de los EE. UU.)
Adecuado para aplicaciones verticales sin flujo de aire forzado, en tuberías con alta ocupación (poca presencia de oxígeno), instalaciones en el mismo entorno o lugares con condiciones de propagación del fuego similares a estas.
Uso limitado – Cable metálico (CMX)
Indicado para aplicaciones horizontales sin concentración de cable, en tuberías metálicas, sin flujo de aire forzado, región expuesta (fuera de la tubería) no superior a 3 metros de longitud y su mayor dimensión transversal (diámetro externo del cable) inferior a 6,4 mm. Es la clasificación con menos protección contra la propagación del fuego, recomendada para su uso en pequeñas oficinas y residencias.
La mayoría de estos cables están fabricados con revestimiento de PVC, contienen halógenos en su composición y, en condiciones normales de uso, son estables y no presentan ningún peligro. Pero, cuando se queman o entran en combustión, emiten gases y humo cuya toxicidad y corrosividad son extremadamente perjudiciales para la infraestructura y la salud del ser humano.
Además de la alta toxicidad, los cables que tienen halógenos presentan combustión con humo denso y oscuro, lo que puede bloquear la luz y evitar la visualización de salidas de emergencia.
Cables tipo LSZH
Con el objetivo de aumentar la seguridad de las personas en un posible incendio, se desarrollaron materiales LSZH – Low Smoke and Zero Halogen (bajo humo y cero halógenos). Esto significa que, durante el proceso de quemado, los cables LSZH no emiten gases tóxicos y generan poco humo, que no es ni denso ni oscuro. Por esta razón, este tipo de cable está recomendado para lugares de gran concentración o circulación de personas, como edificios comerciales, edificios públicos, centros comerciales, estaciones de tren y metro, hospitales, aeropuertos, hoteles, escuelas, data centers, además de aplicaciones horizontales y verticales, lugares con o sin flujo de aire forzado, o lugares con condiciones similares de propagación del fuego.
Los cables LSZH deben cumplir con las características ignífugas de los cables según la norma IEC 60332-1 o IEC 60332-3, así como los requisitos de densidad de humo y toxicidad de los gases generados en su combustión. Los cables clasificados como IEC 60332-1 (LSZH-1) son recomendado para aplicaciones más simples, sin el uso de mazos/ concentración de cables (similar a CMX).
Para aplicaciones en cableado estructurado, en las que se utilizan mazos de cables LAN, se recomienda utilizar la clasificación IEC 60332-3 (LSZH-3), con características de inflamabilidad similares al CM. En caso de incendio, este tipo de cable tiene una buena capacidad para ralentizar la llama, lo que lo hace más adecuado para ambientes con una alta concentración de personas.
Conclusión:
Para lugares con concentración o circulación de personas prevista, se recomienda utilizar cables LSZH (LSZH-3), ya que no emiten gases tóxicos, generan poco humo, que no es denso y oscuro y la clasificación de combustión es para uso general.
[1] ABNT NBR 14705 – Clasificación de Cables Internos para Telecomunicaciones – Comportamiento Frente a la Llama. 2010.