Smart cities: el futuro de las ciudades llegó para quedarse

Furukawa Solutions refuerza la importancia de contar con tecnología de vanguardia para hacer crecer las ciudades inteligentes.

El aumento de la necesidad de contar cada vez con mayor y mejor conectividad, permitió que las ciudades digitales evolucionen hacia ciudades inteligentes, un nuevo concepto que promueve la utilización y combinación de tecnologías para garantizar el buen funcionamiento de los recursos, a la vez que funcionan para solucionar problemas de los ciudadanos. La información obtenida en tiempo real permite que un municipio/ciudad sea proactivo, reduciendo el tiempo de reacción ante las adversidades.

Las ciudades inteligentes constituyen el mejor camino para el desarrollo e innovación de los centros urbanos, integrando gobiernos, empresas y la sociedad en sí en la búsqueda de soluciones innovadoras para resolver los problemas de movilidad urbana, salud, seguridad, eficiencia energética, entre otros. Sin embargo, esta integración solo es posible a través de tecnologías de conectividad avanzadas, que permiten la interconexión de sistemas que generan información y análisis para una mejor toma de decisiones por parte de los administradores públicos.

Con una infraestructura de red eficaz, la administración pública dispondrá de información precisa para actuar de forma predictiva, asertiva y con premisas estadísticas, mejorando el desarrollo de los centros urbanos y cambiando para siempre la vida de los ciudadanos. Además, las ciudades del futuro requieren soluciones adecuadas para ambientes agresivos y de misión crítica, por esa razón las empresas deben invertir en una adecuada infraestructura de comunicaciones.

La opticalización de la conectividad digital, además de permitir que las ciudades experimenten una era de evolución gracias a la tecnología inteligente, también contribuyen a optimizar la inversión de los recursos públicos locales.

En este escenario es donde la fibra óptica cobra cada vez mayor relevancia, ya que constituyen soluciones de conectividad que maximizan el uso de la infraestructura y el ancho de banda disponible en las ciudades, facilitando, por ejemplo, el uso del Internet de las cosas. Esta conectividad de dispositivos a Internet, combinada con tecnologías como big data e inteligencia artificial, proporcionan herramientas analíticas para las ciudades inteligentes, lo que les permite volverse autónomas.

“Las ciudades inteligentes rápidamente se están multiplicando, lo que implica importantes desafíos en materia de conectividad. El uso de fibra óptica aumenta la fiabilidad en este ambiente crítico y garantiza la comunicación entre subestaciones eléctricas porque es inmune a las interferencias electromagnéticas. Además, ofrece un alto rendimiento en tasas de transmisión de datos y permite la integración de varios servicios de telecomunicaciones por el mismo medio físico”, explica el ingeniero Lucas Samyn de Furukawa.