Introducción
En la última década hubo una fuerte implementación de redes de fibra óptica hasta la casa del cliente final.
Muchos de nosotros hemos visto a nuestras casas transformarse, además de hogares, en lugares multifuncionales de trabajo, estudio, videojuegos, IoT, que se suman a las ya conocidas plataformas de streaming, redes sociales y compras.
Con esa transición hacia el concepto de residencia “multi-play” y un mayor número de proveedores disponibles para el suscriptor, la exigencia por calidad y disponibilidad aumentó exponencialmente. El cliente ya no admite fallas, pues puede cambiar de proveedor con facilidad, buscando mejor servicio, más banda, menos latencia y más confiabilidad.
Con ese nuevo escenario, el desafío para el proveedor, además de vender un nuevo paquete de servicio, es conectar rápidamente a este nuevo cliente y, por supuesto, dar mantenimiento extremadamente ágil cuando sea necesario. Para esto, la mejor forma es utilizar sistemas preconectorizados, que incluyen cajas de acceso selladas, cables de interconexión preconectorizados con conectores robustos, así como los cables drop de acceso preconectorizado, también con conector robusto…